A menudo me preguntan qué es la sexología y cuál es la experticia de un sexólogo, razones por las cuales voy a referirme a ambos términos en este artículo a fin de esclarecer las dudas.
La sexología es la especialidad que se dedica al estudio y manejo de la sexualidad humana en general, lo que le permite abarcar un amplio espectro de situaciones que incluyen la reproducción, la identidad sexual, las disfunciones sexuales, las parafilias, los problemas de pareja, la educación sexual, y todos los factores relacionados con estos temas.
El objetivo primordial y final de la sexología es la obtención de una vida sexual satisfactoria y plena, lo que a su vez repercute en la mejoría de la estima de las personas, el reforzamiento del vínculo de la pareja y en la calidad de vida.
El especialista es un profesional de la medicina que se ha formado, además, como sexólogo, por estudios de Postgrado en Sexología Clínica, en los que se estudian las disfunciones sexuales, las terapias y los abordajes adecuados, por lo tanto, es idóneo para el manejo de este tipo de alteraciones.
¿En qué momento se recomienda acudir a un Sexólogo?
Cuando una persona o pareja sientan malestar o alguna dificultad relacionada con su sexualidad, ya sea falta de deseo, problemas para excitarse o para alcanzar el orgasmo, ansiedad de ejecución, eyaculación precoz, disfunción eréctil u otros motivos, debe acudir a un sexólogo, quien ayudará a identificar la causa e indicará las terapias apropiadas.
Una sexualidad sana es parte integral del concepto global de salud y es un pilar importante dentro de la relación de pareja. Robert Sternberg, en su teoría triangular del amor, lo caracteriza según tres componentes:
- La Pasión, como estado de intenso deseo de unión con el otro, gran deseo sexual o romántico, acompañado de excitación psicológica.
- La Intimidad, son los sentimientos que promueven el acercamiento, la conexión y el vínculo, que implica el deseo de dar, recibir o compartir.
- El Compromiso, es el trabajo y la responsabilidad que conlleva mantener el vínculo con la pareja. La decisión de amar a la otra persona y el compromiso de mantener ese amor en los buenos o malos momentos.
Con el paso de los años, la pasión en las parejas suele disminuir y los encuentros sexuales suelen espaciarse y volverse monótonos y rutinarios hasta llegar a desaparecer, lo que origina insatisfacción, conflictos de parejas, resentimientos e incluso infidelidad y separación.
Sin embargo, a pesar de que los problemas relacionados con la sexualidad son mucho más frecuentes de lo que solemos pensar, muchas personas y parejas no le dan la importancia que merecen, ya sea por vergüenza, ignorancia, o por creencias infundadas; razón por la que suelen acudir a la consulta cuando ya se ha generado un importante malestar emocional y se ha alterado la dinámica de la pareja. De la mano del sexólogo, la pareja puede volver a descubrir la emoción de la vida sexual, generar encuentros satisfactorios y reconstruir la unión.
Otros temas que competen al sexólogo, y por los que se recomienda sea consultado, es la educación sexual de los adolescentes, la orientación al iniciar vida sexual activa, los cambios en la dinámica de la sexualidad que se producen en las parejas a través de los cambios vitales, como son los embarazos, la crianza de los hijos, el cambio corporal, la menopausia, la andropausia, la sexualidad en la tercera edad, la sexualidad en personas con discapacidades físicas, dolores crónicos, etc.
Los motivos más frecuentes de consulta en sexología por parte de los hombres, suelen ser la eyaculación precoz y la disfunción eréctil, y en las mujeres la falta de deseo sexual y la anorgasmia.
Describir cada una de estas disfunciones requeriría de un escrito para estas, pero me permito señalar que la disfunción eréctil, la cual suele ser la más conocida por la población general, tiene en el 80 % de los casos origen psicógeno, lo que significa que su manejo terapéutico debe ser realizado por un especialista en sexología, antes de ser tratada con medicamentos.
Aunque estas disfunciones se describen como trastornos separados, muchas veces existen en conjunto con otros. Por ejemplo, una mujer que decide acudir a consulta por presentar dificultad para alcanzar el orgasmo, al realizarle la historia clínica completa podemos encontrar que la paciente presenta trastorno del deseo o trastorno de la excitación, lo que definitivamente va a dificultar la obtención del orgasmo. De igual modo, un hombre con eyaculación precoz puede tener a su vez ansiedad anticipatoria, lo que agravaría la disfunción.
Vemos pues, que la sexología es una rama de la salud que involucra componentes orgánicos, fisiológicos y psicógenos, y en su evaluación completa se necesita realizar una historia clínica detallada, exámenes de laboratorio e imagenología de ameritarlo el caso.
La sexualidad está influida por nuestra cultura, valores morales, creencias religiosas, educación familiar, estado de salud, trastornos depresivos o ansiosos, posibles traumas psicológicos, etc. Esta es la razón por lo que la sexualidad de las personas debe ser atendida por expertos, ya que el tratamiento será siempre individualizado y adaptado a las necesidades de la persona o pareja.
Si desea más información, consulte con un experto en sexología.
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Dra. Heidi Saavedra Pérez
Médico Psiquiatra y Sexóloga
Consultorios Pacífica Salud