La incidencia de cáncer en el mundo está aumentando rápidamente en un contexto de una mayor población que ha envejecido. En el año 2020, se estima que mundialmente se diagnosticaron 19.3 millones de casos nuevos de cáncer y 10 millones de muertes; se estima que para el año 2040 esta cifra se acercará a 28 millones de casos. El diagnóstico del cáncer de manera temprana es fundamental para reducir su mortalidad.
Cuando hablamos de tamizaje en cáncer se trata de una serie de pruebas o exámenes que ayudan a detectarlo en una persona que no presenta síntomas. Es decir, se realiza en personas asintomáticas. Esta prueba ayudará a su detección temprana, disminuyendo la mortalidad relacionada al tipo de cáncer que se está tamizando. En algunos casos estos estudios son capaces de detectar lesiones precancerosas que pueden ser tratadas incluso antes de transformarse en cáncer, disminuyendo así la incidencia de malignidad.
Consiste en pruebas con alta sensibilidad para poder identificar la mayoría de los casos y se aplica a poblaciones de riesgo promedio, pero con una incidencia elevada del cáncer. Debe ser económica, reproducible y accesible.
El éxito de un programa de tamizaje consiste en que las personas en riesgo se realicen los estudios recomendados. Sin embargo, se sabe que hay disparidad tanto en la disponibilidad como en la asistencia a realización de estos estudios entre los diferentes grupos socioeconómicos, así como la edad y factores psicosociales como la forma en que el paciente percibe su riesgo de cáncer.
Actualmente las neoplasias en donde existe mayor evidencia para realizar tamizaje son el cáncer de mama, cáncer de colon y recto, cáncer de pulmón (en fumadores) y el cáncer cervicouterino (cuello del útero).
Las recomendaciones de tamizaje pueden variar entre países y son basadas tanto en evidencia como en opiniones de expertos, como por ejemplo las principales guías de Estados Unidos y Reino Unido.
En esta ocasión les comparto las recomendaciones norteamericanas para el tamizaje dadas por el US Preventive Services Task Force (USPSTF).
Cáncer de mama
Las mujeres deben realizarse una mamografía cada año de por medio a partir de los 40 años. Previamente se recomendaba inicio desde los 50 años, sin embargo, la nueva evidencia apunta a los 40 años como edad de inicio de estudios de tamizaje, ya que cada vez se diagnostican más mujeres jóvenes entre los 40 y 49 años con cáncer de mama.
Cáncer cervicouterino
Recomendada en mujeres entre 21 y 29 años, cada 3 años con citología cervical sola. En mujeres entre 30 y 65 años con citología cervical sola, cada 5 años en mujeres con infección por el virus del papiloma humano de alto riesgo o cada 5 años en combinación con pruebas de VPH de alto riesgo y citología cervical (conocido como cotesting). El VPH (virus del papiloma humano) de alto riesgo es un tipo que puede caucer cáncer cervicouterino y otros tipos de cáncer como ano, vagina, vulva, pene y orofaringe.
Cáncer colorrectal
Mujeres y hombres entre 45 y 75 años deben realizarse estudios de tamizaje. Existen múltiples estudios de tamizaje, las cuales pueden ser pruebas realizadas a las heces o pruebas de visualización directa. Los diferentes estudios que pueden realizarse son la colonoscopía cada 10 años, sigmoidoscopia flexible cada 5 años, colonoscopia virtual cada 5 años (colonografía por tomografía). Sangre oculta en heces de alta sensibilidad cada año (gFBOT), prueba de inmunohistoquímica fecal (FIT) cada año, prueba de ADN con inmunohistoquímica fecal cada año (sDNA-FIT). Es muy importante discutir las opciones con su médico para decidir cuál examen o combinación de exámenes es la mejor para cada individuo.
Cáncer de pulmón
Mujeres y hombres entre 50 y 80 años con una historia de fumar 20 paquetes/año (como ejemplo: 20 cigarrillos diarios por 20 años o 40 cigarillos diarios por 10 años) y que actualmente fuman o han dejado de fumar en los últimos 15 años: Realizar tomografía de tórax de baja dosis de radiación de manera anual.
De presentar un estudio de tamizaje anormal, deberán realizarse otros estudios para determinar un diagnóstico certero (como, por ejemplo, una biopsia). Aquellas personas cuyo tamizaje es negativo recibirán una recomendación de su médico para realizarse el siguiente estudio de tamizaje en un tiempo prudencial. Los estudios de tamizaje para cáncer no son únicos en el tiempo, deben realizarse con cierta frecuencia, tal como expliqué previamente.
Es muy importante hacer énfasis en que todos estos estudios deben ser discutidos con su médico especialista, incluyendo los factores de riesgo del paciente, así como antecedentes personales (por ejemplo, presencia de pólipos en el colon o anormalidades en mamografías previas) y antecedentes familiares (historia de cáncer en la familia u otras enfermedades); así como resolver sus dudas con respecto a los riesgos y beneficios de estos estudios.