El joven escritor panameño nos habla sobre la genesis de ‘Ramas y Raices’, un libro de tres cuentos, que trata ciertos problemas humanos con el ingrediente del humor negro y que surgieron preguntadonse “¿cómo escribo un personaje que quede bien con la historia que quiero contar?”. De igual manera nos habló sobre sus influencias y la próxima obra, que tiene en mente para hacerle una oda al periodismo.

En tu obra abordas el tema de tener o no familia, un problema que se da a nivel mundial. ¿Qué te llevó a tratar este tema?

Fue la situación en la que me encontraba, había salido de una ruptura, estaba en ese momento en el que sientes, que el mundo se te cae encima, pero decidí hacer que Basilio fuera el reflejo de todo lo negativo que sentía. De ahí nació el querer tocar temas un poco más sensibles, un poco más viscerales como son la soledad con Clementina o las malas compañías en el relato de los Jackson.

¿Cómo te dió por abordar un tema tan difícil con el humor negro?

No solo el no tener familia, sino las malas compañías o las malas familias, que al final es como no tenerla. No es por nada propio, no basé ningún personaje en mí o en algún conocido, simplemente quise tocar ese tema. Me senté frente a la pantalla y me dije “¿cómo escribo un personaje que quede bien con la historia que quiero contar?” Y eso es lo que salió.

Los títulos de los cuentos son: “El hombre que quería ser péndulo”, “Los retoños del señor Ovidio y  “Pánico en el cementerio”, ¿Qué tiempo te llevó escribirlos y de qué manera surgieron?

El primero fue “El hombre que quería ser péndulo”, fue una inspiración del momento, me puse frente a la computadora y lo escribí entero porque lo tenía rondándome en la cabeza. Me surgió la idea caminando a la universidad y lo escribí en una clase. “Los retoños de don Ovidio”, al contrario me costó un poco más, tardé una semana terminando de pulirlo bien porque la historia sufrió varios cambios bastante radicales para que quedara en lo que tenía en mente. “Pánico en el cementerio” demoré dos semanas porque ese cuento si estuvo creado justamente para hacer el libro y para que fuera una antología de relatos con tres cuentos, fue creada para ese momento.

De acuerdo a lo que expresaste en una entrevista, tienes 2 años escribiendo. ¿Cómo te dio por ser escritor?

Yo creo que de chiquito, no sé cómo decirte, porque llevo leyendo y escribiendo desde niño. Aquí en mi casa hay una barbaridad de libros, mi mamá siempre ha tratado de inculcarme ese hábito de leer y de expresarme por medio de la escritura. Lo de ser escritor no fue algo reciente sino que lo llevo haciendo desde muy corta edad.

¿Cuáles son los escritores de tu predilección e influencia?

Pues tengo la biblioteca llena de Lovecraft, algo de Oscar Wilde, algunos de Hemingway, A Sangre Fría de Truman Capote, García Márquez, pero de mi predilección e influencia te diría Boris Vian, Danilo Kiš. Para este libro, principalmente, me basé mucho en las obras de Danilo Kiš, Joseph Conrad, Boris Vian, esos 3 escritores me marcaron de una manera absoluta, muy profundamente. Ellos son las tres influencias de este libro.

¿Algún otro tema que tengas en mente

Tengo pensado un próximo libro, lo estoy empezando, quiero que sea una oda al periodismo. Creo que es una labor bárbara que está perdiendo muchísima fuerza y respeto que le tenía la gente. Estoy escribiendo una novela para que el público recuerde lo que realmente significa el periodismo, lejos de todo lo que estamos viviendo, lejos de todos los problemas que tiene que combatir el periodismo hoy en día, lejos de ese cierto repudio que tiene la gente con los periodistas. Así que estoy haciendo algo que sea interesante, aparte para aportar mi grano de arena en traer de vuelta un poco de respeto y de ese cariño que le tenía| el oficio.

¿Qué nos puedes decir de estos tres relatos?

Son divertidos de leer, más que nada que sean literatura entretenida. Tampoco le metí reflexiones así muy profundas o muy complicadas. Por lo que es fácil de digerir, fácil de entender y de comprender. Es un libro para disfrutar, no es algo que necesites estar en un estudio viendo palabra por palabra para saber qué traté de contar. Es un libro transparente, se entiende en cuanto abres la primera página. Las historias están hechas para que empatices con los personajes, entiendas la trama, la locación y la situación en las primeras líneas. Son tres relatos que, a pesar de no estar conectados por una misma historia, comparten una lógica interna que los conecta y hace que el libro tenga cohesión.