Por: Larissa Y. Herrera Reyes
Periodista
Panamá es un país con una riqueza natural maravillosa, que sin duda atrae tanto a panameños como a extranjeros y en los últimos años, ha tenido un mayor auge el turismo interno. Los destinos comprenden montañas, ríos y cascadas con niveles distintos de dificultad en su trayectoria, pero que en definitiva dejan extasiados a quienes son amantes de explorar y conocer nuevos sitios para sus aventuras.
Entre estos mágicos lugares se encuentra en la Provincia de Coclé cerca al Parque Omar Torrijos, específicamente en la comunidad de Barrigón en El Copé, el chorro Las Yayas el cual es el más alto de un circuito comprendido con otros dos chorros más bajos llamados Camarón y Las Golondrinas. El recorrido es agradable, con imponentes árboles que parecen competir en tamaño unos con otros, la brisa fresca que se apresura en acariciar con su suavidad el rostro y lugareños gentiles con sus sonrisas y saludos te hacen sentir como en casa.
La Carretera está asfaltada y en buenas condiciones, una vez se llega cuentan con áreas donde se pueden dejar los autos estacionados con total seguridad, para ingresar es necesario registrarse y también pagar, ya que cuentan con un grupo encargado en la comunidad, quienes manejan lo recaudado para dar el mantenimiento necesario a las instalaciones y velar porque los visitantes cuiden y respeten el sitio.
Las tarifas para los extranjeros son de B/2.00 y para nacionales de B/1.00 con un horario de lunes a domingos, es importante que, en temporada de lluvias, se tenga precaución porque de darse alguna creciente es de manera muy rápida. Se puede llevar alimentos, pero también cuentan con una pequeña, pero completa tiendita para comprar algún refrigerio. Desde que se inicia el recorrido se podrán encontrar letreros con datos curiosos e informativos sobre las especies de flora y fauna reinantes en el lugar, todo el entorno se convierte en un “spot” para tomar fotos espectaculares.
Los senderos cuentan con escaleras y barandas, pero se recomienda caminar con cuidado pues por la humedad pueden estar resbalosas, se aconseja llevar calzado y ropa apropiada, bañarse en las cristalinas aguas desde el primer chorro hasta llegar al más alto es una experiencia increíble, que conquista todos los sentidos. Cerrar los ojos por un momento y solo escuchar ese imponente ruido del agua cayendo, es como transportarse a otro mundo y por segundos imaginarse el por qué le llamaron Las Yayas y es que cuenta la leyenda, que se les puso este nombre porque veían bañándose a 3 mujeres que no eran conocidas por la comunidad, pero lo misterioso era que no todos tenían el privilegio de verlas. Los años transcurrieron y las apariciones continuaron y como para esa época a las muchachas se les decía yayas… de allí el nombre.
Y así como el Chorro Las Yayas tenemos muchos más lugares para aventurarnos y descubrir en toda la geografía nacional, pero siempre debemos recordar que es importante informarse y tomar en cuenta si podemos hacerlo por nuestra cuenta o si es necesario apoyarse con un guía especializado.