Colgado: Un cuento de Navidad, El Abeto y el Cascanueces 

El arte es como un  amplio terreno fértil en que germinan todos los temas. La temática navideña no se queda por fuera de las páginas escritas por grandes autores como Charles Dickens, Hans Christian Andersen al igual que Piotr Ilich Chaikovski, pero este último de una forma circunstancial. En esta nota te hablaremos sobre “Un Cuento de Navidad”, “El Abeto” y “El Cascanueces”.

Un Cuento de Navidad 

La novela escrita por el inglés Charles Dickens en 1843 y llevada innumerables veces al cine, teatro, televisión cuenta la historia del avaro y malhumorado Ebenezer Scrooge su encuentro con varios fantasmas durante la Nochebuena y su proceso conversión luego de reflexionar sobre sus defectos. 

Esta novela refleja el pasado, presente y futuro de una persona, que a pesar de su apatía  así como su odio por la Navidad es admirado por su empleado Bob Cratchit y querido por su sobrino Fred.

Al encontrar su nueva oportunidad Scrooge mejora la relación con su sobrino y colaborador llegando incluso apoyar a su hijo El Pequeño Tim quien padece una discapacidad. 

El Abeto 

De la pluma del danes Andersen tenemos “El Abeto”, un cuento publicado en 1844 que narra la historia de un árbol que tiene ansiedad por crecer, pero a pesar de esto pasa por alto lo grande es  la etapa que se vive en la actualidad.

Ambientado en una época navideña reconstruye por todo lo que pasan los pinos que ponemos en nuestras casas dejando como enseñanza que no hay que saltarse etapas y que todo debe llevar en su momento antes de que sea demasiado tarde para tomar acciones ante consecuencias irreversibles. 

La abogada y comentarista en temas literarios Itzel Mecott nos dice sobre estas dos obras: 

Ambos autores pueden llegar a las casas  “Un cuento de Navidad” (Dikens), enseñándonos la importancia de dar a otros y en “El abeto” (Andersen) mostrándonos la grandeza de vivir el momento y quedarse en nuestras vidas.

El Cascanueces

El autor original fue el alemán Ernst Theodor Amadeus Hoffmann siendo versionada al ballet en 1892  por los rusos Piotr Ilich Tchaikovski, Iván Vsévolozhsky y Lev Ivánovich Ivánov, basandose en la adaptación del francés  Alejandro Dumas.

Esta historia que se adapta a la Navidad trata sobre el juguete de Marie Stahlbaum, el Cascanueces, que lo recibe una noche de Navidad, llegando a cobrar vida, luego de derrotar al Rey Ratón, después de una dura batalla, la lleva a un reino mágico poblado por una variedad de muñecos cascanueces. Todo esto ocurre durante un sueño, que tiene la niña luego, que se van todos los invitados. 

Estas figuras son originarias del territorio germano,  que luego gracias a la literatura y ciertas tradiciones de algunos artesanos alemanes, se fueron adaptando a los días de Navidad, pero, originalmente eran amuletos y servían para partir la cáscara de las nueces.

Esta obra tiene un dato  curioso, que no es precisamente navideño, que el director la orquesta sinfónica de Panamá, Jorge Ledezma Bradley nos explica: el cascanueces desde el punto de vista de la comprensión de la historia es un ballet, el cual aparece un cascanueces, en la época  navideña, y por eso se ha tomado esa circunstancia, para hacer algo representativo, pero, no tiene nada que ver con el nacimiento del niño Jesús, que es la celebración que, se da en ese momento.

Sobre los compositores Arcangelo Corelli de Italia con su “Concierto de Navidad” y el “Oratorio de Navidad” del alemán  Juan Sebastian Bach,  cuya temática, es el tiempo de Adviento indiscutiblemente el experto nos dice, “el concierto de navidad de Corelli al igual que que muchos otros compositores que hicieron conciertos, que titularon de navidad, es una tentativa instrumental de crear esa atmósfera del adviento, en que los seres humanos se juntan para disfrutar de la compañía uno de otros, se hacen regalos todo eso celebrando la natividad del niño Dios.  Hay compositores como Johann Sebastián Bach, por ejemplo, que ha escrito el Oratorio de Navidad, es el nacimiento oratorio completo sobre el relato del nacimiento de Cristo a través de una orquesta que va acompañada de cantantes, solistas y un coro, que cuenta la historia, de manera cantada y hay muchísimos más compositores que han contribuido para el repertorio específico de navideño”.

La licenciada, colaboradora y esposa del director de la orquesta sinfónica de Panamá Darcilyn Scott Masdeu nos amplía sobre la historia de  los cascanueces, “la tradición alemana era que se regalaba uno para ahuyentar todos los malos espíritus de la casa y se ponían en una esquina. Hoy en día ellos no rompen nueces, pues, son decorativos”.

Scott Maseu agrega que: “no es un villancico, no es una canción de navidad,  como lo es: “Jingle Bells o Harty”, “Hark The Herald Angels Sing”, pero a la gente le gusta cantarla para Pascua, porque tiene eso que une a las almas, y se ha convertido en una tradición. !Qué casualidad que para navidad siempre se baila El Cascanueces!”.

Sobre la grandeza  de estas obras literarias que hemos hecho mención el escritor y promotor cultural Carlos Fong nos dice: Yo creo que el atributo principal de esas obras es que tocan mucho las cosas, que tienen que ver con la naturaleza humana. Aspectos que son universales por eso perduran en la historia y trascienden como casi toda la buena literatura a nivel universal.