Ansiedad, depresión y todo tipo de dificultades al saber que una persona se le viene el mundo encima por un cáncer a cuestas, es lo que trata en sus terapias, la licenciada Lidia Luna para dar esa voz de aliento, que siempre será una gran luz en un túnel difícil de atravesar.
Conversamos con esta especialista de la salud mental, egresada de la Universidad Católica Santa María la Antigua, que le gusta estar en conexión con el mar y estar junto a sus seres queridos.
⦁ Usted, es una Psicóloga especializada en la psicoterapia del cáncer. ¿Cómo se realiza esta terapia que es tan complicada para el paciente y sus familiares?
R/. Como Psico-Oncóloga especializada en la psicoterapia del cáncer, mi enfoque se fundamenta en una comprensión profunda de las complejas dimensiones emocionales, psicológicas y sociales que acompañan a la experiencia del cáncer tanto para el paciente como para sus familiares. Reconozco que el impacto del cáncer va más allá de los aspectos puramente físicos, permeando todos los aspectos de la vida de quienes están involucrados.
Para abordar esta complejidad, mi trabajo como terapeuta comienza estableciendo una relación terapéutica sólida y de confianza con el paciente y su familia. Creo un espacio seguro y acogedor donde se sientan libres de expresar sus emociones más íntimas, sus miedos, sus esperanzas y sus frustraciones. La empatía y la escucha activa son pilares fundamentales en este proceso, ya que permiten validar y comprender las experiencias individuales de cada persona.
A lo largo de la terapia, utilizo una variedad de enfoques y técnicas adaptativas para ayudar a los pacientes y sus familias a enfrentar los desafíos únicos que surgen durante el tratamiento del cáncer. Esto puede incluir la enseñanza de habilidades de afrontamiento específicas, como técnicas de relajación, respiración consciente, visualización o mindfulness, que les brindan herramientas prácticas para gestionar el estrés y la ansiedad.
Además, proporciono información clara y comprensible sobre la enfermedad y sus tratamientos, ayudando a disipar los miedos y la confusión que a menudo acompañan al diagnóstico de cáncer. Trabajo en estrecha colaboración con el equipo médico del paciente para garantizar una comunicación fluida y una atención integral que aborde tanto las necesidades médicas como las emocionales.
Otro aspecto crucial de mi trabajo es el apoyo emocional continuo a lo largo de todo el proceso de tratamiento. Esto puede implicar ayudar al paciente a lidiar con el impacto emocional del diagnóstico, enfrentar la incertidumbre del tratamiento, manejar los efectos secundarios de la medicación o procesar los cambios en su identidad y autoimagen debido a la enfermedad.
Además, me ocupo de las preocupaciones sociales y prácticas que pueden surgir, como problemas financieros, dificultades laborales o cambios en las relaciones familiares y sociales. Trabajo en colaboración con trabajadores sociales y otros profesionales para ayudar a resolver estos problemas de manera efectiva y proporcionar un sistema de apoyo integral.
0. ¿Cómo maneja el tema del duelo y la esperanza, dos variantes muy comunes en esta patología?
R/. En efecto, el paciente oncológico desde el momento de recibir el diagnóstico percibe la pérdida de la salud la cual confronta con mucha incertidumbre.
El diagnóstico de cáncer desencadena un torrente de emociones en el paciente y sus seres queridos, entre las que se encuentran el duelo y la esperanza, dos aspectos fundamentales que abordo con especial atención en mi práctica como Psico-Oncóloga.
El duelo es un proceso emocional muy complejo y adaptativo que enfrenta un paciente oncológico, decimos adaptativo al referimos a la forma en la cual el paciente va hacer frente a esta enfermedad. Cuando hablamos de duelo se asocia comúnmente con la pérdida de algún ser querido, no obstante el duelo también aparece ante una enfermedad grave como lo es el cáncer ya que esto conlleva cambios significativos. Como la pérdida de la salud, hábitos cotidianos, planes futuros e incluso la persona puede pensar en la pérdida de su propia vida.
En cuanto al duelo se hablan de varias fases como la fase de negación, de ira o enfado, de negociación, de depresión y la de aceptación. Debemos tener presente que no todas las personas atraviesan por estas fases, ni en el mismo orden ni con la misma intensidad, al ser cada persona diferente. El duelo es un proceso adaptativo y natural del ser humano por lo tanto no es una patología sino una vivencia a la cual debemos acompañar a la persona.
El diagnóstico de cáncer nos confronta una situación nueva no deseada y desagradable que provoca mucho miedo, por lo tanto provoca un gran estrés relacionado con la incertidumbre hacia el futuro del paciente. Además el diagnóstico y tratamiento supone una ruptura en la vida del paciente para su proyecto de vida e impacta en todas las esferas de su vida viéndose afectadas la calidad de vida del paciente y sus familiares. Podemos decir que el proceso oncológico requiere de un proceso de duelo y cada frase de este proceso nos confronta con la elaboración de diferentes duelos y pérdidas. Para cada pérdida se requiere un proceso de adaptación específico que aborde la situación puntual.
El duelo como proceso psicológico es una reacción que se produce después de una pérdida la cual no es solo de la muerte de un ser querido sino también en las pérdidas de objetos materiales de los cuales hemos depositado vínculos afectivos como las pérdidas de roles, de estatus, de una posición económica y social, ante la pérdida del trabajo, de la autoimagen, de la autonomía, apariencia física,de la salud, entre muchas más.
El paciente oncológico se convierte en ejemplo de un paciente con muchas pérdidas al tener que enfrentar muchos duelos los cuales pueden ser seguidos durante de todo el proceso oncológico. Cada cambio y pérdida va ligada a los tratamientos de la enfermedad los cuales suponen nuevos duelos que a menudo son desagradables por ejemplo, la caída del cabello tras recibir quimioterapia, los vómitos, la pérdida del apetito, la pérdida de la fatiga , cansancio y dolor. Algunas personas pueden ser capaces de pasar por estas pérdidas sin necesidad de apoyo.
Sin embargo otras personas necesitan un acompañamiento para asegurar llegar a la fase de adaptación por lo cual una intervención precoz es muy útil para valorar en qué momento del proceso oncológico el paciente y la familia necesitarán un acompañamiento más cercano para evitar que estos duelos se vuelvan patológicos e incluso brindarles herramientas para poder encarar nuevas situaciones vitales de la mejor manera posible.
La esperanza es la percepción de que las cosas irán bien en el futuro en relación a una situación determinada independientemente de cómo está la situación actual. Esta emoción se presenta en gran medida en el paciente oncológico una vez haya pasado el impacto inicial del diagnóstico, siempre está la esperanza de curarse. La esperanza es una excelente herramienta cuando hay motivos para utilizarla y si está se utiliza para ahorrar el sufrimiento de la persona por ejemplo cuando la persona le queda poco tiempo de vida y se desea que este tiempo restante el paciente esté motivado. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la esperanza también puede convertirse en una espada de doble filo, especialmente cuando se enfrenta a un pronóstico desfavorable. En estos casos, es fundamental abordar la esperanza de manera sensible y empática, brindando un apoyo emocional adecuado y ayudando al paciente a encontrar un equilibrio entre la esperanza y la aceptación de la realidad.
El manejo del duelo y la esperanza en el contexto del cáncer requiere una comprensión profunda de las complejas emociones que acompañan a esta enfermedad, así como un enfoque centrado en el paciente que combine el apoyo emocional con la información y las estrategias de afrontamiento adecuadas. Como Psico-Oncóloga, mi objetivo es acompañar al paciente y a sus seres queridos en este viaje emocional, brindándoles el apoyo y las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos con fortaleza y esperanza.
0. Díganos algunos mitos y realidades de la consulta en psicología.
R/. En mi experiencia como Psico-Oncóloga, he encontrado que hay muchos mitos y realidades sobre la consulta en Psicología que vale la pena aclarar.
Uno de los mitos más comunes es que solo se debe buscar ayuda psicológica cuando se tiene un problema grave o se está al borde de un colapso emocional. La realidad es que la terapia puede ser beneficiosa para cualquier persona, en cualquier etapa de la vida, ya sea para gestionar el estrés cotidiano, mejorar la autoestima o resolver conflictos interpersonales.
Otro mito es que solo las personas “débiles” necesitan terapia. Esto es completamente falso. Todos enfrentamos desafíos en algún momento de nuestras vidas, y pedir ayuda para superarlos demuestra valentía y autoconocimiento.
Un tercer mito es que la terapia es interminable y puede durar años. Si bien algunas personas pueden beneficiarse de un tratamiento a largo plazo, muchas otras encuentran alivio y mejoría en sólo unas pocas sesiones. La duración y el enfoque de la terapia dependen de las necesidades individuales de cada paciente.
Otro mito común es que los Psicólogos tienen todas las respuestas y soluciones. La realidad es que somos facilitadores del cambio y el crecimiento personal, pero el verdadero trabajo lo realiza el paciente. Nosotros proporcionamos herramientas, apoyo y orientación, pero el proceso de cambio depende del compromiso y la voluntad de la persona que busca ayuda.
Si nos enfocamos en la atención al paciente oncológico, solemos tener otra serie de mitos muy comunes, como por ejemplo, que la Psico-Oncología es solo para pacientes terminales. La realidad es que, en mi práctica, veo pacientes en todas las etapas de la enfermedad, desde el diagnóstico hasta la supervivencia. El apoyo psicológico como lo hablamos hace un momento, puede ser invaluable en cada fase, ayudando a los pacientes y sus familias a enfrentar desafíos emocionales y a encontrar un sentido de esperanza y fortaleza.
Otro mito muy común es que la terapia no es efectiva y no hace ninguna diferencia en el tratamiento del cáncer, aquí debo decir que he sido testigo de los profundos impactos positivos que tiene el apoyo psicológico en la vida de los pacientes con cáncer y sus familiares, inclusive. Desde mejorar la calidad de vida hasta fortalecer la adherencia al tratamiento, el apoyo psicológico marca una diferencia real en el bienestar general.
“La terapia es un espacio seguro y de apoyo donde las personas pueden explorar sus pensamientos, emociones y comportamientos”. Es importante desmitificar estas creencias erróneas para que más personas se sientan cómodas buscando ayuda psicológica cuando la necesiten.
0. Con un alto índice de personas que padecen esta enfermedad cómo nota la aceptación de las terapias.
R/. Cuando un paciente se une a nuestra sesión grupal dirigida a aquellos recién ingresados, a menudo lo hace con una mezcla de incertidumbre, miedo y cierta reserva sobre su visita al Instituto Oncológico Nacional. Por lo general, no espera recibir atención en salud mental en su primera consulta. Sin embargo, es gratificante observar que el índice de aceptación de nuestras terapias, proporcionadas por el equipo de Psico-Oncología, es sorprendentemente alto.
Después de este primer contacto, es común que los pacientes acudan a nosotros de manera espontánea, ya sea siguiendo el protocolo institucional o tras ser referidos por sus médicos tratantes al identificar situaciones como: ansiedad, depresión, dificultades en la adherencia al tratamiento u otros trastornos psicopatológicos.
Como Psico-Oncólogos, nuestra labor es acompañar el proceso de adaptación y afrontamiento del paciente desde el momento del diagnóstico hasta las fases finales de la enfermedad. Nos esforzamos por crear un entorno en el que los pacientes se sientan dispuestos y cómodos al participar en las terapias que ofrecemos, reconociendo que cada individuo enfrenta el cáncer de manera única.
Uno de nuestros principales objetivos es brindar apoyo y orientación tanto a los pacientes como a sus familias a lo largo de todo el proceso de la enfermedad y el duelo, identificando y abordando cualquier reacción patológica que pueda surgir durante este camino.
Dado el alto número de personas afectadas por esta enfermedad y la diversidad en sus formas de afrontamiento, consideramos que realizar un abordaje inicial es crucial. Este enfoque nos permite reforzar, ajustar o modificar ciertos aspectos para hacer que el proceso de adaptación y aceptación de las terapias sea más llevadero y beneficioso para el paciente.
0. Ya sea a nivel institucional o empresarial cúal es la importancia de hacer capacitaciones sobre este tema y qué ideas da para el desarrollo de estas a lo largo del año.
R/. La importancia de llevar a cabo capacitaciones sobre el cáncer, ya sea a nivel institucional o empresarial, radica en comprender que detrás de cada diagnóstico hay una persona y una red de apoyo familiar que enfrentan un desafío emocionalmente abrumador. Estas capacitaciones no sólo desempeñan un papel crucial en la eliminación de estigmas asociados con la enfermedad, sino que también tienen el poder de crear una conciencia más profunda sobre las complejidades y desafíos que enfrentan los pacientes con cáncer en su día a día.
En el ámbito empresarial, proporcionar capacitaciones sobre el cáncer a los equipos de trabajo puede tener un impacto significativo en la creación de un entorno de trabajo más solidario y compasivo. Al estar mejor informados sobre la enfermedad y sus implicaciones, los trabajadores pueden ofrecer un apoyo más significativo a sus compañeros de trabajo que puedan estar atravesando por la experiencia del cáncer. Además, estas iniciativas de capacitación pueden incluir la sensibilización sobre la importancia de la detección temprana, los signos y síntomas a tener en cuenta, así como la promoción de un acceso más fácil a los recursos y servicios de apoyo, como los proporcionados por los Psico-Oncólogos.
El apoyo profesional brindado por los Psico-Oncólogos es fundamental en el proceso de adaptación y afrontamiento tanto para los pacientes como para sus familias. Se ha demostrado que contar con un acompañamiento emocional adecuado puede ayudar a reducir significativamente los síntomas de ansiedad y depresión, mejorar la calidad de vida y fortalecer la capacidad de afrontamiento del paciente frente a los desafíos físicos y emocionales que conlleva el tratamiento del cáncer.
En el contexto de la práctica privada, como la que llevo a cabo en Panama Cancer Clinic la disponibilidad de servicios de Psico-Oncología especializados, puede marcar una gran diferencia en la experiencia del paciente. Ofrecer un acompañamiento continuo y personalizado con un Psicooncólogo puede ayudar al paciente a navegar de manera más efectiva por los desafíos emocionales y psicológicos asociados con el cáncer, desde el momento del diagnóstico hasta las etapas posteriores del tratamiento y la recuperación.
Además de las capacitaciones periódicas para las empresas, se pueden organizar eventos educativos y de sensibilización sobre el cáncer a lo largo del año, dirigidos tanto a la comunidad en general como a grupos específicos, como pacientes en tratamiento, sobrevivientes de cáncer y cuidadores. Estos eventos pueden incluir charlas informativas, talleres prácticos, sesiones de terapia grupal y recursos impresos o en línea para garantizar que la información y el apoyo estén disponibles para aquellos que los necesiten.
En última instancia, invertir en capacitaciones y servicios de apoyo psicológico para pacientes con cáncer es una inversión en el bienestar emocional y la calidad de vida de las personas afectadas por esta enfermedad. Al proporcionar acceso a recursos y servicios de apoyo emocional, podemos ayudar a fortalecer la resiliencia y la capacidad de afrontamiento de los pacientes y sus familias, y mejorar significativamente su experiencia durante todo el proceso del cáncer.
0. ¿Dónde realizó sus estudios y en qué hospital hace sus consultas?
R/. Mis estudios los realicé en la Universidad Católica Santa María La Antigua, ubicada en la Ciudad de Panamá, donde me gradué como licenciada en Psicología. Sin embargo, mi camino académico tomó un giro significativo luego de vivir eventos personales que me llevaron a buscar una comprensión más profunda del sufrimiento humano y las formas en que podemos enfrentarlo.
Motivada por estas experiencias, decidí ampliar mis horizontes y me embarqué en una travesía temporal hacia España, donde tuve el privilegio de cursar un máster especializado en Psico-Oncología y Asistencia Espiritual al Final de la Vida. Este programa no solo me brindó un conocimiento más profundo sobre la complejidad emocional que rodea a los pacientes con cáncer y sus familias, sino que también me dotó de herramientas prácticas para abordar estas situaciones de manera más efectiva y compasiva.
Además de mi formación en Psico-Oncología, he realizado estudios avanzados en Terapia de Pareja, Sexualidad y Familia, reconociendo la importancia de abordar la salud mental desde una perspectiva holística que considere tanto los aspectos individuales como los interpersonales de la experiencia humana.
Mi enfoque terapéutico se basa en la creencia en el poder transformador de las emociones y su estrecha relación con nuestra salud mental y bienestar general. Creo firmemente que cada emoción que experimentamos está conectada intrínsecamente con nuestro estado físico y mental, y que trabajar en conjunto con nuestras emociones puede conducir a una vida más equilibrada y satisfactoria.
En mi práctica como Psicóloga en Panama Cancer Clinic y en ION, ofrezco una variedad de servicios destinados a ayudar a mis pacientes a enfrentar y superar los desafíos emocionales que puedan surgir en sus vidas. Desde la psicoterapia general hasta terapias especializadas para pacientes oncológicos, parejas y familias, así como la asistencia espiritual al final de la vida, estoy comprometida a proporcionar un apoyo integral que aborde las necesidades únicas de cada individuo y su entorno.
Mi objetivo es crear un espacio seguro y compasivo donde mis pacientes se sientan escuchados, comprendidos y apoyados en su viaje hacia una vida más plena y significativa. Confió plenamente en que juntos podemos explorar nuevas formas de afrontar los desafíos y trabajar hacia un mayor bienestar emocional y personal. No dudes en ponerte en contacto conmigo si necesitas apoyo.
0. En cuanto a su lado humano qué nos puede decir
R/. Soy una persona profundamente arraigada en los lazos familiares, disfruto enormemente de los momentos que paso con mis seres queridos y busco oportunidades para reunirme con ellos con frecuencia. La conexión con la naturaleza es una parte fundamental de mi vida, especialmente el mar, cuyas olas me transmiten una sensación de paz incomparable. Disfruto enormemente escuchando el canto de las aves, admirando los colores vibrantes de los árboles y dejándome llevar por la brisa marina en la playa, un lugar que considero sagrado y que evoca recuerdos preciosos.
El ejercicio, en particular correr, es una actividad que encuentro terapéutica y revitalizante. Me brinda la oportunidad de despejar mi mente, conectarme con mi cuerpo y recargar energías.
Me defino como una persona empática, sencilla y tranquila, con un profundo deseo de ayudar a los demás. Mi sinceridad y transparencia son rasgos distintivos en mis relaciones personales; soy un libro abierto con aquellos que me transmiten confianza y valoro la reciprocidad en la construcción de conexiones genuinas.
En mi trabajo, encuentro una fuente inagotable de pasión y compromiso. Siempre me esfuerzo por ir más allá de lo esperado, porque creo firmemente en la importancia de brindar ayuda desinteresada a los demás. Para mí, la generosidad y la solidaridad son pilares fundamentales de una vida plena y significativa.
0. ¿Algo más que agregar?
Agradezco profundamente la oportunidad de abordar estos temas tan cruciales y necesarios. Es esencial comprender que buscar apoyo en la salud mental no es un signo de debilidad ni indica que hay algo “mal” en nosotros. Aunque hemos avanzado significativamente en la reducción del estigma en torno a la salud mental, aún persisten ciertos prejuicios que debemos superar. Como seres humanos, todos enfrentamos momentos de adversidad en la vida y necesitamos herramientas para hacerles frente. Pedir ayuda es un acto de valentía y autocompasión, un reconocimiento de nuestra propia humanidad y la disposición a buscar el camino hacia el bienestar.
Quiero subrayar la importancia de crear conciencia sobre los procesos emocionales que experimentan los pacientes con cáncer y cómo podemos apoyarlos de manera efectiva. Tanto como profesionales, familiares, compañeros de trabajo y miembros de la sociedad, tenemos la responsabilidad de aprender a comprender y acompañar a quienes enfrentan esta enfermedad de manera más saludable y compasiva. Cada individuo merece ser visto en su totalidad, no solo como alguien afectado por una enfermedad, sino como una persona completa con necesidades emocionales, mentales y espirituales que deben ser atendidas con comprensión y empatía.
Si estás buscando apoyo emocional o psicológico, quiero que sepas que no estás solo ni sola en tu camino. Estoy aquí para ofrecerte mi ayuda y acompañamiento. Mis servicios incluyen:
⦁ Psicoterapia en general, destinada a brindar un espacio seguro para explorar tus pensamientos y emociones, y encontrar formas saludables de afrontar los desafíos de la vida.
⦁ Psicoterapia especializada para pacientes oncológicos, diseñada para ayudarte a enfrentar los desafíos emocionales específicos que surgen durante el proceso de tratamiento y recuperación del cáncer.
⦁ Terapia de Pareja, Sexualidad y Familia, para abordar las relaciones interpersonales y los desafíos familiares que pueden surgir durante momentos difíciles.
⦁ Asistencia Espiritual al Final de la Vida, para aquellos que buscan apoyo y orientación espiritual durante períodos de enfermedad terminal.
Para programar una cita o para obtener más información sobre mis servicios, no dudes en comunicarte conmigo. Puedes llamar al siguiente número de teléfono: 310 2869 para agendar tu consulta o enviarme un correo electrónico a
lluna@panamacancerclinic.com.
Estoy aquí para ayudarte a encontrar la luz en la oscuridad y a caminar contigo hacia una vida más plena y significativa. Recuerda, siempre hay esperanza y siempre hay ayuda disponible para quienes la buscan.